Recuerda: pídele a tu mamá o papá que te lean este cuento y jugad juntos porque:
«La lectura es a la mente lo que el ejercicio es al cuerpo»
(Joseph Addison)
La pandilla investiga en isla del náufrago Bubbu
En este cuento para niños, los integrantes de la Pandilla investigan en una isla del náufrago Bubbu, pero ¿Quien ese náufrago?
Aquella tarde todos estaban sentados en la hierba pensando que hacer.
El instituto y el colegio ya habían terminado y Cari, Ciar, Ohm y Ori ya estaban buscando una nueva aventura para recorrer.
El sol brillaba después de la hora de la comida y el aire era fresco y agradable.

La paloma Blue Cherry había quedado en que los iría a buscar,
Volando por el cielo azul de la tarde infinito.
Así que cuando llegó posó sus patitas pequeñas en la tierra y bajó su cuerpecito y sus alas para que ellos se pudieran subir.
Al estar ya subidos, Ciar, le avisó y Blue Cherry despegó para enseñarles la isla que les había prometido.
-Ya tiene que ser algo muy bueno Blue-dijo Ciar
-Oh ¡Sí! ¡Sí que lo es!-contestó Blue Cherry sonriendo.
-¿Y que se supone que había en esa isla?-preguntó como siempre curiosa Cari.
-¿Sabes esos humanos que viven en las islas?
-¿Nos llevas a la isla para ver humanos? No quiero verlos. ¿Y si nos pisan?-preguntó asustado Ori
-Oh, no debes temer… creo que allí hay una colonia de hormiguitas
-¿Y cómo sabes eso?-volvió a sentir curiosidad Cari
-Lo sé porque he visto varios caminitos de coco y frutos secos… los humanos no transportan la comida así…-se rio Blue Cherry

Aunque todo el grupo estaba asustado, y aunque no lo demostraban 😀
Se dejaron guiar por Blue Cherry quien aterrizó aleteando de manera inesperada en un matorral de hierbas que descansaban al lado de una gran palmera.
Todos bajaron con cuidado, y el primero en querer marcar el camino fue Ciar, quien les ordenó que fueran detrás de él, mientras él tomaba una caña “en defensa de todos los insectos o hormigas desconocidas que aparecieran”
Caminaron mientras Blue Cherry se quedó a descansar debajo del matorral a la sombra y comenzaron a caminar por la tierra entre las hierbas altas.

La vida del explorador hormiga no es fácil.
Cuando ya llevaban un rato y mientras Ohm iba mirando hacia atrás y hacia adelante para memorizar el camino de vuelta, Ori se tropezó con un gran obstáculo al salir del caminito de hierbas.
Aturdidos, se pusieron la mano delante de los ojos para tapar el sol que les alumbraba y al mirar para arriba ¡se dieron cuenta de que era uno de los tobillos del humano que estaba sentado en una roca!

Asustados y temblando, corrieron hacia las hierbas de nuevo, lo justo para asomarse mientras contemplaban a Bubbu el náufrago, comerse un coco.
-Oye es mejor que nos vayamos pitando de aquí-dijo chillando Ori.
-¡Ni lo sueñes!-gritó Ciar-quiero saber quiénes son esas hormigas.
-¡Calla!-dijo Cari-¿tú crees que nos vale la pena que tire ese coco o que nos pise?
-¡No, pero tenemos que ir con cuidado y saber quiénes son! Espera ahí.
Y en efecto… Ciar, en su atrevimiento tenía razón…
¿Sabes qué pasó?
Cuando Bubbu tiró su cáscara de coco, varias migas de coco cayeron al suelo, entonces las hierbas de enfrente comenzamos a moverse.

-¡Tapaos!-avisó Ciar.
Cuando se dieron cuenta, un escarabajo y dos hormigas grandes salieron de su escondite con varias cáscaras de coco como escudo, encima de su cabeza, y se ordenaron entre sí recoger las migas que Bubbu había dejado caer y que para él ¡eran casi invisibles!
Nuestra pandilla favorita, los estaban contemplando entre las hierbas, y Ciar en un impulso, les habló, gritando detrás de las hierbas:
-¡Eh! ¿Quiénes sois?-ellos se dieron vuelta buscando la voz.
-¿Y tú quién eres?-dijo el escarabajo
-Somos de Hormitrópolis
-¿Dónde es eso? ¡Sal de donde te escondes!
Como ellos no salían, el escarabajo corrió, seguido de las dos hormigas, hasta que apartando las hierbas, encontraron a Cari, Ohm, Ori y Ciar agachados.
Las hormigas fuertes tomaron a cada uno debajo de cada brazo, mientras nuestros amigos protestaban, el escabarajo era el jefe, así que ordenó que los llevara a su bosque.
Cuando Blue Cherry, llegó al final del camino de las hierbas, para llevar a sus amigos a casa, ¡no vio nada! Haciendo eso que pensara en si les habría ocurrido algo malo.
Así que se le ocurrió observar la tierra alrededor de Bubbu, que se había tumbado a tomar el sol, ¡y estaba dormido!
La marca de unas patitas, la llevó a volar hasta el escondite donde el escarabajo y las hormigas tenían a todos, pero se escondió en un árbol.
Cuando el escarabajo y las hormigas iban a hacer de ellos ¡sus prisioneros! Blue Cherry decidió asustarlos con su aleteo, moviendo las alas muy fuerte, ¡y fue así como salvó a Ciar, Ori, Ohm y Ori!
¿Crees que volverán más veces a la isla del náufrago Bubbu? ¿Volverá Ciar a ser tan atrevido?
¡Seguramente no!
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