Cuento: La recolección de mini fresas salvajes es fiesta en el verano de Hormitrópolis

monti
monti
Manualidades para niños con frutas

¿Estáis preparados/as para poder leer otros cuentos cortos para niños? Hoy te traigo una nueva historia, en la que conocerás porque ¡La recolección de mini fresas salvajes de la granja de los humanos eran tan importantes para las hormiguitas!

La recolección de mini fresas salvajes en Hormitrópolis

La granja de los humanos estaba rodeada de un montón de espacios con hierba que a las hormiguitas les gustaba rodear, para llegar hasta las fresas, moras y las frambuesas que caían siempre maduras, tan ricas ¡como el azúcar! ¡o incluso más!

La recolección de las fresas salvajes

Cuando sabían que iban a estar más maduras, ya bien entrado el verano, todas las hormiguitas del pueblo se desplazaban a la entrada de las granjas de los humanos, en esas partes de hierba, donde estaban seguras, llevando carros de madera fabricados por ellas, que les permitía cargar con las deliciosas frutas para luego, hacer zumo y vino en sus casitas de Hormitrópolis.

Pero en mitad de la celebración de la cosecha de las mini fresas salvajes, ellas hacían un picnic que las ayudaba a probar las frutas antes de llevarlas a sus hogares.

Todas las mamá hormiguita llevaban sus bolsitas de mimbre con mieles y siropes y las pequeñas hormiguitas hacían carreras de caramelos, para ver quienes se llevaban lo mejor. ¡Y quienes comían más gominolas!

Cuando terminaban el picnic, después de disfrutar de la merienda de sirope y cuando las hormiguitas más fuertes habían cargado las  mini fresas salvajes maduras, todas hacían un círculo y le daban las gracias a la naturaleza ¡por darles alimentos tan sabrosos y jugosos como el de la pulpa de la fresa!

De esta manera, generaciones y generaciones de hormiguitas podían comenzar a darle gracias a todos aquellos Dioses que los/las habían alimentado, haciendo que siempre hubiera tiempo para saber que era bueno recibir, de donde había que alimentarse, y apreciar las pequeñas celebraciones de antaño, que año a año ¡siempre se repetían!

Y así, cuando ya era el atardecer, las hormiguitas volvían cantando y riéndose juntas, recordando lo bien que les había sentado el sol y el paseo en familia. Todos tiraban de los carros llenos de las pequeñas fresas maduras, siendo el momento de llegar a casa, ¡con una colecta!

El pueblo después, desprendía un hermoso aroma a jarabe dulce, a mermelada, ¡y era la época preferida de los niños, porque las abuelas hormiguitas siempre hacían galletas! Al finalizar el verano, llegaba otra época, la de las castañas… pero eso ya es otra historia 😉

*Sabías que…

  • Cada estación tiene una fruta de temporada?
  • En verano llegan las frutas de hueso como las nectarinas, los melocotones y las bayas, tales como las frambuesas. Pero también ¡el melón y la sandía!
  • Las fresas llegan en primavera y verano para quedarse.
  • Mientras que, a finales del verano llega la uva y el higo.
  • Bien entrado el otoño llega la chirimoya y el caqui. ¡Carnosas y más energéticas!

¿Te ha gustado la historia?

¿Por qué no te apuntas a la newsletter? Recibirás las nuevas entradas en tu email (¡cero spam, prometido!) y tendrás acceso a contenido exclusivo para los seguidores de Hormitrópolis. Por supuesto, es gratis. 🙂

Hormitropolis
Nosotros también odiamos el spam. Tu email está a salvo.
Summary
Cuento: La recolección de mini fresas salvajes es fiesta en el verano de Hormitrópolis
Article Name
Cuento: La recolección de mini fresas salvajes es fiesta en el verano de Hormitrópolis
Description
Hoy te traigo una nueva historia, en la que conocerás porque ¡La recolección de mini fresas salvajes de la granja de los humanos eran tan importantes para las hormiguitas!
Author
Publisher Name
Hormitrópolis
Publisher Logo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

¡Entra y lo descubrirás!